( POESÍA DE BEATRIZ LILIANA ESLIMAN)
Incrédula me has convertido por tus mentiras pequeñas,
El perdón que tú me pides, no creo que pueda ofrecerlo,
pues ahora soy en una mísera mujer con corazón de piedra.
Mi piel ya no es lo que era, hoy es solo pecado que se hiela,
porque tus manos la tocaron para dañar y humillar sin frontera.
Qué nesecidad imperiosa la de tu ego y deseo que mansilla y deshonra,
y mis ojos se asombran ante pupilas que tiemblan quebradas de tristeza.
Egoísmo es lo que te sobra y lo contagias por doquier como peste.
Porque enfermo estas de emociones y en huérfano conviertes tu ser.
Déjame en paz, ni atrevas a tomarme en posesión que no mereces,
ni mis labios, ni mis lágrimas, solo un eterno y sentenciado enmudecer.
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©copyrigth 2011. de Beatriz Liliana Esliman.(derechos reservados del autor)
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